Posteado por: zco1999 | 5 abril 2012

Wilhelm Gustloff: el otro «Titanic»

(Modificado de exordio.com)

Quizá porque se trataba de un buque cargado de heridos y refugiados alemanes en plena Segunda Guerra Mundial, y quizá porque fuen hundido por los torpedos lanzados desde un suamrino soviético, una de las potencias aliadas en aquel conflicto. Sea cual sea la causa, lo cierto es que la mayor tragedia de la historia de la navegación es practicamente desconocida para casi todo el mundo.

Ahora que está a punto de cumplirse el centenario del hundimiento del Titanic, merece la pena conocer la historia del Wilhelm Gustloff: el «Titanic» desconocido, cuyo listado de víctimas empequeñece cualquier otro.

El Wilhelm Gustloff  fue un trasatlántico de línea construido en 1937 y asignado a la organización «Kraft durch Freude» (KdF) o «Fueza de la Alegría» un subgrupo del «Deutsche Arbeitsfront» (DAF) o Frente del Trabajo. El DAF era un organismo encargado de organizar la fuerza laboral alemana en pro del partido nacionalsocialista y el KdF se encargaba de organizar actividades culturales y recreacionales para los trabajadores  entre ellas cruceros de turismo. Así, el partido proveía actividades que antes estuvieron al alcance sólo de los ricos y poderosos. En compensación, la clase trabajadora se desempeñaba de manera más productiva, participando de los beneficios que su esforzado trabajo le daba al Tercer Reich.

Wilhelm Gustloff

El buque fue construido por Blohm & Voss en los astilleros de Hamburgo. Fue botado el 1 de agosto de 1936, y entró en servicio el 5 de mayo de 1937.  El nuevo trasatlántico tenía 208,5 m de eslora y 23,5 m de manga, desplazaba 25.484 tn impulsado por motores diesel de 9.500 HP. Contaba con una tripulación de 420 oficiales y marineros y podía transportar a 1465 pasajeros de una sola clase con una velocidad de 15,5 nudos. Fue bautizado MV Wilhelm Gustloff en honor a un líder nacionalsocialista suizo asesinado en 1936.

Sus primeros servicios

Tras entrar en servicio el MV Wilhelm Gustloff zarpó en cruceros de placer que incluyeron puertos del Atlántico, el Mediterráneo y del Mar del Norte. Aparte de esas travesías llevando turistas alemanes, el Gustloff realizó un viaje a España, poco antes de comenzar la Segunda Guerra Mundial, para transportar de regreso a la Legión Cóndor que ayudó a Franco a ganar la Guerra Civil. El convoy compuesto por los cruceros Robert Ley, Deutsche, Stuttgart, y el Sierra Córdoba, además del Gustloff llegaron a España el 24 de mayo de 1939, descargando grandes cantidades de ayuda para las fuerzas de Franco, que incluían medicinas y alimentos. Dos días después, la Legión Cóndor embarcaba en los buques que zarparon inmediatamente rumbo a Alemania.

Lazaretschiff

Meses después, poco antes de comenzar la invasión a Polonia, el Gustloff fue pintado de blanco con una banda verde de proa a popa, y cruces rojas en varios lugares del casco y cubierta.  Fue comisionado en la Kriegsmarine como Lazaretschiff (buque hospital).  Tras un intenso período de entrenamiento para sus nuevas actividades, entró en servicio por primera vez después de la campaña de Polonia en Danzig-Neufahrwasser, transportando a Alemania 685 heridos durante la campaña y regresando a Danzig donde quedó asignado para prestar servicios médicos. También formó parte del convoy que movilizó miles de alemanes que fueron regresados a Alemania desde las regiones que en ese momento eran ocupadas por los soviéticos, de conformidad con el acuerdo germano-soviético de repartición de Polonia.

Desde mayo hasta julio de 1940, el Gustloff fue movilizado a Oslo en Noruega para atender a los heridos durante la campaña en ese país.  Finalmente le ordenaron que se dirigiera a Stettin el dos de julio transportando 563 heridos.

Wohnschiff

Desde mediados de 1940, hasta casi fines de año, el Gustloff fue incorporado a los planes para la Operación León Marino. Pero, luego de la cancelación de la operación fue enviado a Noruega para transportar a otros 414 heridos de regreso a Swisnemünde. Terminada esa misión, el Gustloff fue enviado a Gotenhafen para ser cambiado de servicio. Fue modificado nuevamente e incorporado al servicio de U-Bootes para actuar como Wohnschiff o buque barraca de la Kriegsmarine. Tras un corto período de preparación fue comisionado primero a la 1.Unterseeboots-Lehrdivision y luego a la 2.Unterseeboots-Lehrdivision. En ese servicio permaneció durante cuatro años albergando a reclutas en entrenamiento en submarinos.

Enero de 1945

En enero de 1945, el Almirante Dönitz ordenó que el Gustloff evacuase al personal de U-Boote y que apoyase de nuevo en la evacuación de refugiados y heridos. De esta forma el trasatlántico pasó a formar parte de la mayor evacuación realizada en la historia, el rescate, y transporte de millones de refugiados, enfermos, heridos y todos los que escapaban de las hordas rusas que desde el este avanzaban arrolladoramente. Todos los buques disponibles en el Báltico fueron dedicados a la evacuación.

En el puerto, más de 60.000 refugiados trataban de abordar las naves en un estado de caos y confusión. Mientras los oficiales trataban de contabilizar a los pasajeros, mucha gente abordaba desordenadamente burlando la guardia que se veía inerme para controlar a la multitud. Los niños deambulaban buscando a sus padres. Un nutrido grupo de auxiliares femeninas de la Kriegsmarine fueron acomodadas en lo que una vez fue la piscina del lujoso trasatlántico ubicada en la Cubierta-E. Todas eran jóvenes de entre 17 y 25 años. Un día antes de zarpar, llegó un tren hospital a Gotenhafen llevando heridos que fueron subidos a bordo y acomodados en la llamada cubierta para tomar de sol donde años atrás, miles de turistas alemanes se broncearon navegando por las aguas del Mediterráneo. Todos los espacios del buque estaban abarrotados de gente. En cubierta se veían algunas ametralladoras antiaéreas instaladas para rechazar posibles ataques aéreos. Sólo dos tercios de los pasajeros llevaban chalecos salvavidas y ante el número de pasajeros era evidente que en caso de emergencia los botes salvavidas no podían albergar al resto.

El buque contaba con una tripulación de 173 hombres, y transportaba 918 oficiales y marineros, 373 mujeres del Cuerpo Femenino Auxiliar de la Kriegsmarine, 162 heridos y 4.424 refugiados. La lista oficial informó de un total de 6.050 personas, pero no cabe duda que muchos cientos más, de una manera u otra, lograron subir a bordo escapando del Ejército Rojo. Las últimas investigaciones dicen que a bordo del Gustloff viajaban, 8.956 refugiados, 918 oficiales y marineros de la 2.Unterseeboot-Lehrdivision, 373 mujeres del Cuerpo Femenino Auxiliar de la Kriegsmarine, 173 auxiliares y 162 heridos graves sumando un total de 10.582 personas.

Rumbo a su destino final

A las 12:30 de la tarde del 30 de enero de 1945, el Gustloff soltó amarras mientras cuatro remolcadores lo sacaban a la rada. El Gustloff zarpó de la bahía de Gotenhafen en un día con muy mal tiempo, precedido por un dragaminas, con una curiosa estructura de mando. Como transporte de civiles estaba bajo el comando del capitán de la marina mercante Friedrich Petersen y como transporte militar asignado a la 2.Unterseeboots-Lehrdivision tenía como comandante al capitán Wilhelm Zahn. Nevaba con vientos fuertes y la temperatura era de -10º C . El mar se encontraba medio congelado y cualquier persona que cayera al mar no podría sobrevivir. El Gustloff comenzó la navegación sin escolta contra los ataques submarinos o aéreos. Ante los aviones enemigos el buque tenía la protección del inclemente clima y unas pocas ametralladoras antiaéreas, pero ante los submarinos estaba inerme. Pronto la oscuridad invernal envolvió al buque y la gente con varios días sin comer ni dormir, cayo presa del mareo. La cubierta estaba congelada.

S-13

A las 21:08 del día 30 de enero de 1945, el Wilhelm Gustloff navegaba entre la Bahía de Danzig y la isla danesa Bornholm, casi a la altura de Stolpmunde en Pommerania, cuando fue descubierto por el submarino soviético S-13 comandado por Alexander Marinesko. El S-13 fue un submarino diseñado en Alemania y construido en Holanda cuando estaba en vigencia el Tratado de Versalles que le prohibía a Alemania poseer una flota submarina. El astillero donde se construyó el S-13 fue una empresa mixta con intereses alemanes procedentes del Krupps Germania-Werft de Kiel asociado con la Deutsche Schiff und Maschinenbau AG de Bremen y la Kriegsmarine. Los gobiernos alemán y soviético negociaron la venta y traspaso de la nave que desde entonces formó parte de la flota soviética del Báltico.

Esa noche de enero de 1945, Marinesko disparó tres torpedos contra el Wilhelm Gustloff que acusó los impactos, escoró rápidamente a estribor recuperando la verticalidad poco después, pero finalmente volvió a escorar. Un testigo, el Oberbootsmannsmatt Karl Hoffman, relató que el primer torpedo hizo blanco en la proa debajo de la línea de flotación, el segundo en la sección media a la altura de la piscina, matando a casi todas las auxiliares de marina, y el tercero a mitad del buque por delante de la sala de máquinas.

En pocos minutos el castillo de proa se encontraba casi bajo las aguas. En menos de 50 minutos el Gustloff se hundió, llevándose hasta el fondo del Báltico a 9.343 hombres, mujeres y niños.  Únicamente 1.239 personas pudieron ser rescatadas con vida por otros buques alemanes que se encontraban en las cercanías en misiones de evacuación o escolta (Otras fuentes calculan únicamente 996 supervivientes). Las aguas del Bático estaban cubiertas de cadáveres con salvavidas. El Torpedoboot T-36 rescató a 564 personas, el Torpedoboot Löwe 472, el Minensuchboot M387 rescató a 98, el Minensuchboot M375 a 43, el Minensuchboot M341 a 37, el Gottingen rescató a 28, el Torpedofangboot TF19 salvó a 7, el carguero Gotland a 2 personas y el Vorpostenboot 1703 rescató a un bebé de tan sólo un año.

Karl Hoffman  fue rescatado por el Torpedoboot T-36 Sufría una severa hipotermia y la tripulación lo reanimó con masajes y te caliente. El T-36 formaba parte del escuadrón de escolta del crucero pesado Admiral Hipper que también llevaba refugiados. El propio T-36 sorteó dos nuevos torpedos escapando a toda velocidad. A las 2 de la tarde del 31 de enero de 1945, el T-36 llegó a Sassnitz.

La mayor tragedia marítima de la historia

Por el número de víctimas, el hundimiento del Wilhelm Gustloff es el desastre marítimo registrado más grande de la historia. En 1955 fue estrenada la película alemana «Nacht fiel über Gotenhafen» que se basó en el hundimiento del Wilhelm Gustloff. De los muchos libros escritos sobre la tragedia Gustloff, el escrito por Heinz Schon, «SOS Wilhelm Gustloff – Die größte Schiffekatastrophe der Geschicte» es el considerado como el más preciso relato sobre el hundimiento del Wilhelm Gustloff.

Alexander Marinesko, comandante del S-13, como resultado de estas acciones fue propuesto como Héroe de la Unión Soviética, pero paradójicamente se le denegó porque el alto mando soviético albergaba dudas sobre si verdaderamente fue Marinesko quien hundió el buque, pues se decía que había sido bombardeado por la Luftwaffe. Finalmente se le otorgó la condecoración a título póstumo.

Los rusos dinamitaron los restos con el resultado de que se partiese el pecio, de manera que desistieron. Hoy día el Gustloff reposa en tres secciones relativamente en buen estado de conservación a 42 m de profundidad en aguas de gran turbidez.

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Respuestas

  1. Increíble. Nadie habla de esta masacre en la que fallecieron más de 9.000 personas, muchas de ellas civiles.
    ¡Me asquea tanta hipocresía histórica!


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